Capítulo 2

_ ¿Qué relación hay entre tú y el príncipe Zuko? _ justo cuando acaba, yo me vuelvo hacia ellos y veo cómo Katara lo mira con mala cara, pero antes de que lo regañe, me adelanto.
_Tranquila no pasa nada, Zuko y yo nos conocemos desde niños, mis padres eran nobles de alta alcurnia así que era muy normal ver a mi familia en el palacio, además mi padre acabó siendo su mano derecha y su mejor amigo, por lo que quedaban muchas veces como amigos y en muchas de esas reuniones se hablaba de una posible boda entre Zuko y yo, así que prácticamente los príncipes y yo crecimos juntos. Cuando tan solo tenía la edad de 10 años, el señor del fuego mandó a matar a mis padres culpándolos de alta traición a la corona solo porque mi padre se replanteaba la guerra. Eso es algo que Zuko jamás supo, ya que yo lo descubrí por casualidad, al ser los mejores amigos de mis padres se quedaron con mi tutela y me trasladé al palacio, consideraban que era lo suficientemente pequeña como para poder manipular mi mente a su beneficio y así convertirme en la futura reina que ellos necesitaban, no obstante, un día paseando por el palacio jugando con Zuko los escuche sin querer, estaban hablando de mis padres y de la auténtica razón por la que los habían mandado a matar, el señor del fuego dijo literalmente “Ese idiota de Hiroshi y su mujer querían abandonar la guerra, menos mal que me deshice de ellos, además ahora nos queda más sencillo conseguir que Sayumi se convierta en la futura reina que queremos para casarla con Zuko" jamás olvidaré esas palabras y el tono en el que lo dijo. Una semana después terminé de organizar mis cosas y me desaparecí por 8 años, ya que cuando tuve la mayoría de edad no podían obligarme a volver_ me quedo mirándolos, ellos no comentaron nada solo me seguían mirando con sorpresa en sus rostros _bueno nosotros al final sí que nos gustábamos y queríamos casarnos, pero al irme el señor del fuego determinó que era una traidora, como habían sido mis padres, y le prohibió a Zuko que se casara conmigo y constantemente intentaba demostrarlo para que Zuko me viera con malos ojos, tenía miedo de que al pasarle el testigo a su hijo, igualmente se casara conmigo y yo acabara con sus planes_ al terminar me río para que quiten las caras de funeral que se les había quedado
_ ¿La nación del fuego mató a tus padres así sin escrúpulo ninguno, aún siendo ellos de la misma nación? _ pregunta Katara
_Sí, el señor del fuego no mira naciones, solo aliados o enemigos
_ ¿Dónde estuviste esos ocho años? _ preguntó Aang
_ En ningún sitio de relevancia solo me refugié con una persona que se volvió muy importante para mí, pero ahora está en las manos de la nación del fuego.


Una vez salvado el avatar acordamos que no podíamos quedarnos más en la tribu del agua del norte, ya que pondríamos en peligro a los niños y ancianos, y para enfrentarnos a los de la nación del fuego necesitamos más fuerza, ya que el avatar solo sabe control del aire, Katara no sabe mucho del control del agua y yo soy la única que fue entrenada en mi control del fuego y fueron pocos años, así que tomamos la decisión de ir a la tribu del agua del sur, ya que habíamos escuchado que era en la única que aún quedaban maestros de agua y en la que no había entrado la nación del fuego por ahora. Aunque antes pasaríamos por el templo del aire del este, ya que Aang tenía muchas ganas de ver su antiguo hogar, Katara, Sokka y yo nos miramos, pero nadie le pudo decir que a los maestros del aire los habían masacrado a todos hace 100 años. Cuando llegamos Aang bajo todo ilusionado a buscar a sus antiguos amigos, ya que para él no habían pasado 100 años, pero encontró todo vacío, caminábamos despacio detrás de él con nuestras miradas tristes, mientras estábamos investigando por nuestra cuenta encontramos un montón de soldados del fuego muertos junto con cadáveres de maestros del aire
_No podemos dejar que lo vea Aang _ dijo Katara
_Sé que no podemos decírselo de esta manera, pero no podremos ocultarle la verdad, todo el mundo lo sabe y creo que si se lo decimos nosotros con tacto es mejor que si se lo dice otra persona_ digo y veo como Sokka me apoya con la mirada, al final decidimos que Katara hable con él y lo encontramos petrificado ante el cadáver de un monje que parecía bastante importante y en mi mente sonó la palabra “tarde”. Enseguida empezaron a brillar sus tatuajes y una enorme ventisca a su alrededor nos alejó de él, Katara se fue acercando a él llamándolo, pero parecía que no la escuchaba, tanto Sokka como yo nos quedamos atrás diciéndole a Katara que volviera que era muy peligroso, pero nos ignoró, desde nuestra distancia solo pudimos ver que intentaba hablar con él, lo abrazo y poco después la ventisca paró y nos pudimos acercar
_ Somos tu familia, ¿verdad, chicos? _ dice esta cuando llegamos junto de ellos
_ No soy la más indicada para que os fieis por ser de la nación de fuego, pero os puedo asegurar que daré mi vida si hace falta por vosotros_ dije, pues sabía que mi procedencia muchas veces podría provocar desconfianza. Una vez pasada esta mala experiencia, montamos nuestro campamento, ya que nos quedaríamos a pasar la noche, también se nos unió el lémur volador al que Aang llamó Momo.


De camino, Aang ve a Katara muy seria, que está cosiendo los pantalones de su torpe hermano
_Déjala en paz, Aang, ¿No ves que está concentrada cosiendo? _comenta, entonces hace un comentario muy feo y Katara le deja de coser los pantalones, mientras me rio y le choco la mano a Katara nos interrumpe Aang
_A donde vamos no necesitarás pantalones_ entonces descendemos en una isla, Aang parece estar buscando algo mientras comentamos que deberíamos seguir volando, ya que ayer ya nos paramos mucho, en lo que se justifica diciendo que Appa está cansada
_Si... nos has convencido_ dice no muy convencido Sokka, pero como llevarle la contraria a una bisonte voladora gigante, pero sin hacer mucho caso, Aang sale corriendo hacia el borde la playa
_Mirad_ dice mientras señala un gigantesco pez que saltaba en el agua_ por eso estamos aquí, carpas elefante, las voy a montar y Katara tienes que mirarme_ dice y comienza a quitarse la ropa, justo después se lanza al agua y nosotros nos miramos entre nosotros mientras Sokka nos dice que está loco haciendo un gesto.

Anime creado por Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko